El recuerdo que siempre debe estar, por los soldados caídos, por los que no soportaron la presión al volver, y por los que sobrevivieron a estas dos situaciones.
El perdón, pero no el olvido, para aquellos que tuvieron la culpa de crear semejante situación.
Y la proclamación infinita, de que esas Islas están ubicadas en la jurisdicción y competencia del mar argentino, por ende pertenecen a esta patria.
Recordar a algunas personas, que el colonialismo territorial, ya esta condenado en el ordenamiento jurídico y en la moral.
Y el deseo que Margaret Thatcher, pida perdón, se perdone y la podamos perdonar.
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